En su declaración, dijo que Eduardo Sempi (24) ya estaba herido cuando él llego a su casa de Rawson al 7700. Además, familiares de la víctima agredieron la vivienda del imputado y fueron aprehendidos.
El hombre detenido acusado de haber golpeado con un fierro a un joven de 24 años en una casa del barrio Belisario Roldán declaró ante la fiscal que el responsable pudo haber sido su propio hijo. La víctima continúa en coma, internada en el Hospital Interzonal.
Si bien la situación parece clara para los investigadores, Rubén Ferreyra (56) aseguró ante la fiscal María Isabel Sánchez que “no tuvo nada que ver” con el ataque que sufrió Eduardo Sempi el viernes a la madrugada. En palabras del imputado por “homicidio en grado de tentativa”, el agresor pudo ser su hijo que habría golpeado a Sempi tras una discusión.
Según pudo reconstruir LA CAPITAL, Sempi y Ferreyra son vecinos en la cuadra de Rawson al 7700. El viernes a la madrugada, Sempi, su hermano y el hijo de Sánchez se habían juntado a tomar cerveza y charlar en el fondo de la casa del detenido. En determinado momento, la charla se volvió una acalorada discusión, con gritos e insultos.
Por el relato de los testigos -el hermano de la víctima y el hijo del acusado-, Ferreyra , molesto por los gritos de la discusión, fue hasta el fondo de su casa armado con un fierro y golpeó salvajemente a Eduardo Sempi en la cabeza. Ante esta situación, el hermano de la víctima llamó al 911 y una ambulancia llevó al joven hasta el Hospital Interzonal.
Este punto difiere de lo expuesto por Ferreyra en su declaración, quien asegura que cuando el fue hasta el fondo de su casa Sempi yacía herido en el suelo. Para los investigadores, el relato de Ferreyra y la acusación a su hijo no son coherentes.
Por otra parte, el viernes al mediodía, con Ferreyra ya detenido, dos hermanos de la víctima fueron hasta la casa del acusado a buscarlo y, como no estaban, generaron destrozos en el inmueble. Personal policial fue hasta el lugar y los detuvo, imputados por la Fiscalía de Flagrancia por “atentado agravado a la autoridad y daños“.
La fiscal Sánchez ordenó una serie de medidas para recabar pruebas y mandó a que se tomaran nuevas testimoniales que puedan aportar datos de lo sucedido esa madrugada, como así también de la relación entre la víctima y el acusado. Además, la policía secuestro el fierro utilizado para golpear al joven.
Para la fiscal, sería fundamental contar con el testimonio de Sempi, quien permanece en coma internado en el Hospital Interzonal y su pronóstico es reservado.